Hoy ha terminado una de las mejores series que habré visto: Lost. El season finale de la última temporada de Lost no ha dejado a nadie indiferente.

Personalmente el capítulo me ha parecido impresionante de principio a fin. Resuelve todo lo que puede resolver y deja abiertos muchos otros interrogantes, menos importantes que el pilar común de la serie que es el nexo de unión entre todos los personajes.

La verdad es que echaré de menos tener un capítulo semanal con los habitantes de la isla de ahora en adelante. Dicen que no pero yo estoy seguro que algún spin-off o alguna otra secuela, aunque sea en formato mini-serie o película sí que harán, ojalá sea así. Y los fans lo agradeceremos llegado el momento, pero por ahora (aquí sí hay un ahora) nos queda disfrutar de cada instante de la serie y de su conclusión.

Seguro que hay un momento de la serie que nos ha impactado mucho (el mío es el instante final de la primera temporada), es ahora cuando debemos recuperarlo, vivirlo para luego volver a guardarlo en nuestro corazón a la espera de que más adelante rememoremos una de las mejores series de la historia.

Frases míticas se han dicho en esta serie y por eso el título del post: “Live together, die alone” que creo que condensa todo lo que representa el season finale, cada uno ha ido muriendo cuando le toca pero al final todos se encuentran, juntos, porque han vivido juntos, han sobrevivido, reído, llorado, amado, odiado, sufrido, gritado y gozado todos juntos.

Viva Lost.