Durante varios meses, probé muchos clientes de correo para OS X. Muchos. Lo primero que usé en el Macbook Pro del trabajo fue Microsoft Outlook (la última versión, la que salió en 2016), luego probé el propio de Apple, la aplicación Mail, probé en esa época Nylas N1, cuando se volvió de pago y tras no verlo muy estable me decanté por Airmail, llegué incluso a comprar su licencia y tenerlo unos meses plenamente funcionando hasta que le hizo cosas feas mi cuenta de Exchange y decidí cambiar, entre otros probé Postbox, Thunderbird y finalmente Mailmate.

¿Por qué buscar un correo alternativo a Outlook o Mail?

Vaya por delante que Outlook y Mail son dos grandísimos clientes de correo. Outlook (estamos hablando de la versión 15, es decir la que salió en 2016, la versión anterior no es un cliente de correo, es una tortura china) creo que es de lo mejor si usas una cuenta Exchange, su última versión es buenísima y aunque debes acostumbrarte a usar atajos de teclado propios (me refiero que no pueden cambiarse) no está mal del todo, la verdad que puedes conseguir un flujo de trabajo bastante decente. Suficiente para la mayoría de usuarios incluso avanzados que necesiten un cliente de correo solvente. Lo que es indecente es el compositor de correo. Es malísimo. No sabes cuando te está guardando el formato, cuando no, las posibilidades de poner textos complejos, listados y usar incluso tablas es un infierno. El compositor de Mail es algo más decente pero no es nada del otro mundo tampoco, sin embargo Mail bajo mi punto de vista tiene varios problemas, que ni siquiera los plugins son capaces de solucionar, en primer lugar los atajos de teclado son malísimos llegando al punto que no hay algo aceptable para clasificar el correo en carpetas. De hecho hay una triquiñuela basada en el menú de ayuda (dos atajos concatenados) para clasificar los correos o bien la otra opción es tener carpetas distribuidas en bookmarks y con los atajos Cmd+1 hasta el Cmd+9 clasificarlos (si tienes más carpetas entonces debes usar el ratón). El flow (entendido por la cadencia y ritmo a la hora de clasificar y responder correo desde tu carpeta de inbox) que se consigue no es bueno, pero además de todo eso, se cuelga. Sí sí, amigo has leído bien, se cuelga, se queda tonto, ¿lo digo más alto? SE VA A HACER PUÑETAS en el momento menos pensado y hay que reiniciarlo (no es frecuente todo hay que decirlo pero puede ocurrir una vez a la semana o dos). Bad robot.

O sea que nuestro objetivo es mejorar el compositor de correo por defecto, tener unos atajos de teclado dignos para poder clasificar bien el correo y además ya puestos a pedir, rendimiento e integración con el sistema. Sigue leyendo para descubrir todos los clientes que probé hasta dar con la aplicación para mí definitiva: Mailmate.

Nylas N1 o la antítesis de Thunderbird y Postbox

Nylas N1 es un gran cliente de correo, aunque cuando yo lo estuve probando en serio estaba en beta y petaba como una escopeta de feria. Era un festival. Cuando consiguieron estabilizarlo (o no, yo tengo mis dudas) lo volvieron de pago y con una cuota a mi modo de ver bastante alta para lo que ofrecía. Vamos, que me pareció caro y de arriesgada inversión. Por contra, como aspectos loables es un cliente bastante configurable, con multitud de plugins, con una interfaz actual y con confirmación de lectura. O sea una aplicación moderna para el correo, cosa que no son ni Thunderbird ni Postbox. Ambos viven en el pasado, Postbox ha querido renovarse y a fe de Dios que no lo ha conseguido, sigue siendo un clon de Thunderbird venido a más sin mucha más gracia que una renovada interfaz aunque se le el plumaje de pajarraco que hay debajo de esa capa de chapa y pintura.

Thunderbird, es bastante personalizable a base de addons como Firefox, pero no ha envejecido igual de bien que el navegador de Mozilla, parece una aplicación de hace 10 años. No hay evolución, y además de todo eso consume recursos como un condenado. Se cuelga, es inestable, se convierte en un engorro. Sin lugar a dudas yo descarto usar Thunderbird en mi día a día y de tener que elegir entre Postbox o Nylas, usaría el segundo, pero antes de nada, después de unas cuantas pruebas descubrí mi primer amor en esto de los clientes de correo: Airmail.

El por qué sí y el por qué no de Airmail

Airmail es una aplicación de correo muy muy buena, tanto que pagué los eurillos que vale su licencia (sinceramente no recuerdo cuanto fue pero para iOS 4,99€ y para mac yo diría que 9,99€, no estoy muy seguro). Tiene una interfaz moderna y por lo general bastante buena (aunque con claroscuros todo hay que decirlo), permite atajos de teclado tipo Gmail (si no sabes de lo que hablo y gestionas una buena cantidad de correo en tu día a día, para ahora, deja de leer esta comparativa y descúbrelos, es otra dimensión para clasificar el correo y moverse por tu inbox) y además y como bonus señoras y señores tiene un compositor que soporta Markdown me pareció una idea absolutamente genial. Diréis puto friki que escribe en Markdown los correos, y os equivocáis. Markdown es muchas cosas pero os aseguro yo que se acabaron todos vuestros problemas de formato, se acabaron también todos los quebraderos de cabeza a incrustar estructuras como listas, listas ordenadas, secciones, headers, tablas incluso, todo eso, independientemnte del correo que recibáis es coser y cantar. Diréis bueno yo no uso eso en mis correos, pues bueno oye yo sí. Además de todo, Airmail permite una suerte de copia en local de tus correos, como una especie de carpeta PST para descargar correo del servidor y guardarlo en local, si tienes espacio limitado en tu quota de Exchange, como es mi caso, eso es de agradecer puesto que te permite realizar búsquedas de correo antiguo que quitaste del servidor para que no ocupe. Hasta ahí muy todo genial, veamos pues porqué lo mandé a la porra.

Airmail y yo vivíamos un idilio, pero me traicionó. Por detrás y con alevosía, sin decirme nada empezó a consumir GB y GB de memoria en mi disco y a fallar a lo bruto en la sincronización con las carpetas de Exchange. Llegué a llenar mi correo del servidor quedándome sin espacio y todo por una mala gestión de la aplicación. Me cabreé. Mucho. Borré todo lo que estaba duplicado en el servidor pero me costó bastante. Además siempre he odiado la gestión que tiene de los adjuntos. No lo hace bien. Qudan ahí como iconos en medio de un hilo. No mola nada eso, cuando quieres recuperarlos no hay una forma fácil de llegar a ellos, sobretodo en hilos largos de correos que no sabe ordenar de forma eficiente. Además de eso, abrí un caso en el soporte pero no me prestaron mucha atención, la solución que me ofrecían era quitar las cuentas y volverlas a añadir (cosa que ya hice sin que solucionase nada), con ciertos aires del típico “Have you tried switching it off and on again?”.

Así, por los fallos en la sincronización y por alguna carencia a nivel de interfaz y porque guardar los correos en local nunca funcionó debidamente, después de un cabreo monumental volví muy a mi pesar a Outlook y a Mail a Mail y a Outlook sin que ninguna de las dos me convenciera. Hasta que le dí una oportunidad a Mailmate. Antes por eso de acabar desembolsando 50 eurazos por la licencia de Mailmate, probé la beta de Spark (ya no está en beta), una aplicación que en iOS me gustó mucho y que de hecho es mi cliente actual en esa plataforma, puesto que aunque compré Airmail para iOS pero quedé tan desilusionado con la aplicación que hasta en iOS dejé de usarlo como castigo o véte tu a saber.

Spark es una grandísima opción (pero no es para mí en mac OS)

Cuando salió la beta de Spark corrí a apuntarme y tengo que decir que es un cliente realmente bueno. Además es la opción que he elegido para iOS. Tiene numerosos aspectos positivos entre otros pues su cuidada interfaz, atajos de gmail, ahora le han puesto etiquetas, y tiene grandes posibilidades de clasificar de forma rápida (Spark aprende tus preferencias al mover emails a carpetas y es realmente efectivo su funcionalidad predictiva). Sin embargo tiene un compositor un poco limitado (he reclamado dos veces al soporte que sorpoten Markdown pero vamos eso es como gritar en una tormenta) y a veces, cuando lleva rato, noto que va un poco lento. La gestión de las firmas es un poco pedrestre también. Sin embargo en global es una muy buena opción, de hecho todavía me sorprendo mirando de vez en cuando si ha salido una nueva versión con mejoras en el compositor.

Ahora en Readdle han fichado a Terry Blanchard que fue el manager de Apple encargado de Mail, parece que lo próximo que van a hacer es integrar un Calendario y sacar versión para Android. Como digo realmente es un cliente digno de elogio y una opción creo que bastante buena en OS X y en iOS.

Mailmaite es el cliente de correo definitivo (al menos para mí)

La interfaz de Mailmate es espartana (siendo benevolentes, y eso que ha sido renovada recientemente, antes era abiertamente peor) pero en cambio es muy flexible. Tiene numerosas maneras de organizar los paneles, las listas de carpetas y la visualización de tu bandeja de entrada. Tiene un compositor de Markdown que es brillante. Y soporta atajos de teclado tipo Gmail. Además es la cosa más estable del mundo. Apenas ocupa recursos. Ordena de forma muy correcta los adjuntos (al final pero de forma clara y siendo accesibles en todo momento) y permite realizar mogollón de opciones de clasificación y filtrado de tus correos, incluso puedes definir de forma fácil carpetas inteligente con condiciones, tipo las smartlists de iTunes, con lógica sencilla y bastante efectivas.

Por el contrario no soporta copiar a local tus correos. Pero es posible ponerle remedio a eso instalándose dovecot, que es un servidor IMAP que puedes instalar en local (es opensource, corre como un servicio y es muy sencillito). No es muy difícil de configurar pero tampoco es coser y cantar. Si necesitas copiar en local tus correos, seguramente Outlook y Mail són tus mejores opciones, pero si te enamoras de Mailmate y no quieres mirar atrás hay formas de conseguirlo. Sería bastante largo de explicar así que mejor lo cuento en otra ocasión y ahora me centro en describir Mailmate.

Lo primero es que el compositor de Mailmate es sublime, soporta un setting para ponerlo permanentemente y por defecto en modo Markdown y la interfaz de escritura tiene una previsualización que se ajusta bastante bien a la realidad. Para seguir el compositor mismo tiene numerosos atajos de teclado para poner negritas o incluso enlaces directamente en Markdown (Cmd+b para bold, Cmd+i y el recientemente añadido Cmd+k que convertirá el texto que tengas seleccionado en un enlace con la dirección que tengas copiada en el portapapeles). Me diréis que Airmail también soporta Markdown pero sinceramente a la hora de previsualizar y de organizar la estructura del correo el de Mailmate es mucho mejor.

Mailmate no es una aplicación pensada para ser atractiva visualmente sinó funcionalmente. Y ahí es donde Mailmate gana a toda la competencia: cada función que tiene está pensada para cubrir necesidades de clasificación, filtraje y búsqueda rápida de tus correos. Además ofrece varias opciones para organizar los paneles y mostrar hilos, correos relacionados y previsualización de lo que tienes seleccionado en una carpeta IMAP.

Finalmente hay un foro bastante acitvo y el desarrollador, un danés muy crack y con poco tiempo libre, te serán de ayuda para ir descubriendo uno de los mejores gestores de correo electrónico que existen bajo mi humilde punto de vista.

Ya pero ¿Son estos motivos suficientes para desembolsar poco más de 50 euros que vale su licencia? Para mí que necesito usar una buena aplicación de correo a diario y de forma extensiva, es un rotundo pero si no estás seguro puedes probarlo durante 30 días (ojo 30 días de uso real, entendiéndose como que arrancas la aplicación descargas y respondes correos) y decidir por tí mismo si te conviene.

Yo por el momento ya tengo mi elección hecha, se llama Mailmate y estoy encantado con lo que ofrece, ¿y tú?