Estamos a punto de terminar el año 2017. 30 de Diciembre, digo yo que tocaría hacer balance de cómo ha sido el año y que esperamos para el año que viene. 2017 ha sido un año con altibajos, como una montaña rusa, con situaciones inesperadas, con habilidades adquiridas, con un ajetreo laboral importante, aplicaciones que he descubierto, en definitiva, muy completo pero a la vez muy estresante.

Voy a intentar poner en negro sobre blanco alguna de estas cosas que he experimentado este año 2017 para acabar, espero, elaborando una lista de deseos para el año que viene.

La obsesión por Colemak y la era post PC

En Abril de 2017 aprendí Colemak, que es una distribución de teclado alternativa a Qwerty de la que os he hablado muchas veces y ya me hago pesado, al final esto va a ser el blog de Colemak y no es plan. Tenéis una explicación muy extensa de mi transición.

También volví a tener iPad, un iPad Air 2 que volví a heredar de mi venerable esposa que adquirió, una vez más, el modelo superior, un iPad Pro de 9,7 cuando salió a mediados de Junio. El iPad me acompaña en mis trayectos del trabajo a casa (a unas horas que mejor no explico) y me permite realmente seguir Twitter, jugar a adictivos juegos y perder el tiempo de la mejor manera. Sin embargo también me permite cuando no tengo el MacBook Pro del trabajo en mi escritorio tener una alternativa realmente buena. Una de las cosas que mejor me funcionan es conectarle un teclado mecánico, como ya expliqué en este post, de forma que uno puede escribir cómodamente, cambiar entre aplicaciones con Cmd+Tab e incluso en mi caso puedo escribir en Colemak (ya que el teclado, Pok3r, lo soporta de forma nativa).

¿Puede mi iPad sustituir mi MacBook Pro? Ni en sueños, creo que sigo siendo mucho más productivo en un entorno de escritorio, por múltiples razones que sería muy largo enumerar, pero como digo es una alternativa decente, si debo hacerlo.

Apps, un gadget y más apps

En Mac OS, ya hablé de Mailmaite como cliente de correo este año, sigo en el mismo, salvo algún quebradero de cabeza puntual, es muy estable, funciona realmente bien y me permite mucha flexibilidad a la hora de clasificar el correo. Le estoy dando una oportunidad a Airmail como cliente de correo alterativo para mis cuentas personales. Y en iOS sigo usando Spark y Airmail, principalmente el primero aunque estoy un poco mosca con algunas cosas como el rendimiento.

Hay una app que he pagado religiosamente en Mac y en iOS que es Things 3 y me hice el fuerte propósito de exprimirla al máximo pero no lo he conseguido, he fracasado una vez más… sigo intentándolo pero lo que más me cuesta es la captura de las tareas. Y si os gustan las listas de tareas en iOS me he bajado aunque no he usado todavía una app muy curiosa que se llama Taskcode2, que define como una especie de código o lenguaje de markup para crear notas y tareas.

Como gadget que no puedo dejar de recomendar, he estado usando desde hace unos días (regalo de navidad de Cris) un Keysmart, que es un organizador de llaves. Es imprescindible. Un must. Solo por tener todas las llaves ordenadas y ganar espacio en tu bolsillo es que no tiene precio. Tengo la versión más sencilla, esta es, cómprala ya, bobo.

Siguiendo con cosas útiles y volviendo a las apps he descubierto una aplicación recientemente que se llama Airtable y que es realmente bestial para el trabajo colaborativo, es como un excel o un access en la nube y permite personalizar todos los campos de la forma que quieras y tiene varios modos de visualización. De momento uso la versión gratuita y me funciona bien para determinadas tareas.

También he redescubierto Firefox, que se ha convertido desde que salió la versión Quantum en mi browser por defecto, por delante de Chrome. Realmente el zorro ha renacido de sus cenizas una vez más (a ver hasta cuando).

Dos apps que usamos a destajo mi señora y yo son Buy me a pie! que somos Pro de por vida, es la mejor aplicación de lista de la compra que hay, y yo creo que hemos probado de todo y la otra app que recomiendo especialmente como recetario es Paprika 3 que se ha actualizado recientemente y que es de lo mejor para sincronizar y planificar recetas.

Mi podcatcher sigue siendo Pocketcasts, sigo suscrito a los mismos podcasts de siempre y algún programa de radio como es “La vida moderna” de la cadena SER que me entretiene bastante.

Y mi cliente de Twitter favorito, incluso en macOS, es Twitterrific al que he vuelto encantado después de usar Tweetbot durante bastante tiempo.

Viajando voy, viajando vengo

Recordando mi viaje a Florida en Diciembre / Enero de 2017, me he movido bastante: Cardiff, Cádiz, Madrid, Stockholm, Olot, viajes relámpago en el curro a Nantes y a Torino, la verdad que viéndolo en perspectiva no me puedo quejar en absoluto.

Todas las escapadas que hemos hecho con Cris, han sido geniales, Estocolmo por ejemplo fue muy divertido, vimos muchísimos barrios distintos y gozamos la ciudad a tope. Ese Gamlastan entrañable, ese Södermalm hipsteriano, ese desayunaco en el Hotel Scandic Grand Central.

Cádiz me encantó, me gustaron sus calles, sus playas y sus gentes. Aunque en ese viaje está claro que hubo una experiencia a destacar, la cena en “Aponiente” el restaurante del Chef del Mar, Ángel León, al que le acaban de dar una tercera estrella Michelin, una gozada para todos los sentidos (aunque una puñalada a la cartera, eso está claro).

Otro lugar que me gustó mucho fue Cardiff, que es una bella ciudad galesa, en la que se han rodado innumerables capítulos de “Dr. Who” fuimos al filming tour experience y al museo, muy friki todo.

Descubrimos también en verano la Garrotxa y en concreto Olot, una zona realmente cojonuda para perderse, con cantidad de naturaleza por explorar, con cantidad de sitios interesantes como Besalú, Castellfullit, o el mismo Olot, o mejor dicho batet de la Serra, en la montaña de al lado de la ciudad, estuvimos en una casa rural aislada pero acogedora, un triunfo.

A Madrid fuimos de boda, en Septiembre y qué quereis que os diga de una de las ciudades más hermosas de Europa que no sepáis ya, he estado muchas veces y ojalá vaya muchas más, Madrid es señorial, tiene cantidad de sitios para descubrir y es espectacular.

Para el año que viene

Al año que viene le pido que sea tan bueno como este o más. Realmente cuando ves en perspectiva todo el año te das cuenta de que hay momentos malos, hay objetivos que te habías planteado y que no has conseguido, pero en general el balance ha sido bueno. Creo que es justo decir que el 2017 ha sido un buen año y que espero que el 2018 sea tan o mejor. Que siga descubriendo sitios, que siga descubriendo apps y lifehacks que hagan mi vida mejor y me hagan ser más productivo, y que siga en progresión en el mundo laboral, siempre adelante.